Nuestro primer contacto con Meyling Tang, vicepresidenta de la Fundación Cocinamar y periodista especializada en pesca responsable fue a través de redes sociales. Nos encantaba que desde Chile, las publicaciones de Twitter relacionadas con la pesca sostenible tuviesen cierto seguimiento. Incluso algún mensaje directo nos hizo pensar en conocernos personalmente.
Pues bien, ese momento llegó, aunque al principio lo veíamos muy lejano. La actividad de Meyling la ha traído de nuevo a Galicia, donde ya vivió un amplio periodo de tiempo, para participar como ponente en el ForoAcui. Ha venido acompañada de Julio Chamorro, pescador del archipiélago Juan Fernández y encargado de la monitorización biológica y pesquera de las islas.
Lo mejor es que se nos ocurrió organizar un encuentro con nuestro referente en O Grove, Isidro Mariño, patrón del Chasula, para que ambos puedan conocer la ría de Arousa, y vivir en primera persona uno de sus principales recursos, el cultivo del mejillón en bateas.
Tras la travesía con Isidro en el Chasula pudimos charlar con Meyling sobre su actividad:
¿Qué actividades promueve cocinamar como fundación?
Somos cuatro profesionales que en Chile armamos una fundación sin ánimo de lucro, hace año y medio, pero ya trabajábamos con el sector desde hace 20 años. Lo que queríamos era formalizar ciertas actividades de la pesca artesanal, especialmente las que tienen que ver con comercialización, turismo o acuicultura a pequeña escala. Éstas actividades se están realizando, pero no están siendo reconocidas en los canales de venta. Intentamos vincular a los pescadores que lideran y que ya estaban haciendo cosas; con cocineros, con la comunidad y con ONG´S, para que sea más visible su emprendimiento.
Somos cuatro perfiles diferentes: un biólogo, una experta en comercio justo y empresariales, una experta en administración pública y yo como periodista especializada en economía pesquera. Estamos buscando modelos para promover en Chile el consumo de pesca responsable, desde distintas maneras. Desde lo más básico como puede ser una clase de cocina hasta cursos formales de capacitación. Para eso nos ocupamos mucho de las redes sociales.
Se trató de aunar esfuerzos entre los pescadores, para que vendiesen mejor sus capturas en un momento en que las cuotas se redujeron. No existía ninguna plataforma que les ayudase y nosotros tomamos ese lugar como nexo de unión con cocineros, que estaban muy interesados en incluir estos productos. Al tiempo, teníamos mucha información en prensa, siempre negativa sobre el estado de los recursos, y tratamos de revertir esa sensación negativa valorizando otros muchos recursos que también están disponibles.
Explícanos el caso concreto de la Merluza Austral.
Es una pesquería que comprende 2000 kilómetros de costa, alrededor de 10.000 personas viven de su pesca, se extrae en Chile desde hace 30 años y el 90% de su mercado se encuentra en España. Cuando aquí decayó su consumo por la crisis, eso significó que el mercado nacional chileno comenzó a ser atractivo. No se sabía que teníamos esa merluza. En los últimos años, se ha creado un comité científico que bajó las cuotas de capturas, y que ha permitido recuperar el recurso, pudiendo luego incrementar nuevamente las cuotas. Sus capturas se reparten entre un 40% industrial y un 60% artesanal. Se ha creado una marca para comercializarla: Merluza Austral Chile y diferenciarla de la merluza del Cabo o de la merluza argentina. Hemos conseguido generar una demanda interna que hasta hace 5 años no existía.
¿Cómo se valoriza el trabajo de los pescadores artesanales?
El valor ya lo tienen de por sí, nosotros ayudamos a hacerlo más visible. Formalmente a través de proyectos, con fondos del gobierno, internacionales, donde tratamos de unirlos y de que se conozcan. Chile es muy largo y realizamos misiones tecnológicas, de manera que podamos transferir buenas prácticas que se realizan en el ámbito de la pesca responsable de una zona del país a otra.
También tratamos de dar a conocer productos de acuicultura de pequeña escala, en ciertas regiones se cultiva por ejemplo ostión del norte (similar a nuestra zamburiña), piures o algas, y no tienen donde comercializarlo, por lo que buscamos el vínculo a través de nuestras plataformas. Se ha creado una red de emprendedores de pesca artesanal que está colgada en nuestra página web en la que se identifican organizaciones que están funcionando bien. Se les arma una ficha técnica y se pone a disposición de quien esté interesado en conectar con ellos. De este modo se les aporta una formalidad y un respaldo a sus actividades.
¿Las empresas turísticas también entran en estas dinámicas?
También hemos hecho esfuerzos con pescadores que están con turismo marinero y con cámaras de comercio y turismo para dar a conocer emprendimientos como éstos. Se ha implementado en dos fases, una para dar a conocer el servicio y otra en la que se busca una posición crítica y se detecten acciones de mejora.
¿En qué consistió tu ponencia en el ForoAcui?
Conté el trabajo que estamos haciendo con esta red de emprendedores que es nueva y a nosotros nos tiene muy contentos, pues es una forma práctica de hacer visible lo que está pasando en la costa. También he comentado cómo transferimos a Chile algunas de las buenas prácticas que se están realizando en Galicia, como formas de valorizar las comunidades costeras o la gastronomía y que yo, por mi experiencia aquí, pude llevarme para allá.
Un ejemplo es la comunidad de cocineros, son 40 en todo Chile que trabajan con nosotros y que adoptan su rol como comunicadores sobre tallas mínimas y recursos que hay que ofrecer. Su participación ha sido clave en las actividades de cocinamar. Nuestra principal herramienta es la gastronomía, pues vimos que la pesca era muy técnica, había mucho conflicto y las noticias eran negativas, por lo que al ser un tema más agradable llega más.
No nos interesa que venga la autoridad a darnos discursos, sino que en nuestros eventos transmitimos lo que siente el pescador, el mariscador, que es quien se sube al escenario.
Mientras la entrevista tuvo lugar, Isidro y Julio pudieron visitar una carpintería de Ribeira, compartiendo anécdotas, y conocimientos sobre barcos y pesca responsable.
En este vídeo Meyling nos explica sus actividades dentro de la fundación Cocinamar a favor de la pesca responsable en Chile y su participación en el foro dos recursos mariños e da acuicultura das rías galegas.
Desde Galicia y nuestro ámbito del Turismo Marinero deseamos que la Fundación Cocinamar alcance todos sus objetivos y el mundo de la pesca responsable en Chile tenga todo el reconocimiento y el valor comercial que se merece. Nuestra más sincera enhorabuena por su gran labor y dedicación
