La singularidad de Galicia queda de manifiesto en la belleza de sus pueblos. Pequeñas localidades repartidas por toda nuestra costa que lucen sus mejores armas: arenales de ensueño, conjuntos arquitectónicos únicos o calles encantandoras.
Ya te presentáramos de la mano de nuestra colaboradora Cati los 5 pueblos gallegos recomendados,pero hoy os dejamos algunos de los pueblos marineros que tienes visitar si pasas por Galicia:
5. Ortigueira
Este municipio coruñés esconde paisajes montañosos como la sierra de Capelada -con montañas como Concepenido de 572 metros de altura- o las sierras de Faladoira y Coriscada, que tienen alturas superiores a 600 metros. Igual de recomendables son sus arenales, como el de Espasante, la playa del Picón y Coasta Xuncos.
4. Cedeira
Situado en la costa norte de las Rías Altas. Es de visita obligada el santuario de San Andrés de Teixido, a unos doce o trece kilómetros de Cedeira. «Un lugar magnífico -reconocen algunas guías turísticas- donde las historias y el rugir del viento y el mar nos hacen ver imágenes increíbles y fascinantes».
3. Ribeira
Una breve caminata por el Paseo Marítimo de Ribeira es suficiente para ver todo el ajetreo pesquero que tiene el pueblo. Todo gira alrededor del mar.
Visitar su lonja es una auténtica experiencia. Una de las mayores lonjas de Europa de bajura. Las negociaciones que se dan en ella son dignas de ser incorporadas a los más prestigiososo MBAs.
La lonja sólo es visitable de martes a viernes. Si tienes mono de pescado el fin de semana el temploa visitar es el mercado, donde podrás encontrar casi cualqueir especie a precios muy adecuados.
2. Porto do Son
Este municipio coruñés destaca por sus más de 25 kilómetros de costa salpicados de multitud de playas, la mayor línea de costa de toda Galicia. Portosín, además de por el castro marítimo de Baroña son visitas obligadas. Su monte está en casi todo el municipio muy cerca de la costa, lo que obliga a la población a concentrarse en torno a la línea costera en casi todo el territorio.
1. Combarro
Pintoresco pueblo marinero ubicado a tan solo 7 kilómetros de Pontevedra. Levantado directamente de una gran piedra de granito, ahorrándose así los costes de terreno, hasta llegar a convertirse en los cimientos de las casas que podemos ver actualmente.
Llama la atención por su zona vieja, donde paseando nos hará viajar en el tiempo gracias a sus casas marineras, el mejor ejemplo de arquitectura popular gallega; su característicos hórreos ¡cuenta con 68! y los cruceiros, con toda la simbología que representan.
No podemos olvidarnos de su iglesia parroquial ni de su puerto deportivo.
A todo esto ¿queréis que os hablemos de su gastronomía? Mejor que vayáis a probarla vosotros mismos para que no nos llaméis exagerados.
¿Qué te parecen? ¿Tienes alguna recomendación? No dudes en dejárnoslas.
