Catherine García es de la ciudad de A Coruña, esa de cuyas playas se dice que tienen el sonido más relajante del mundo (2009) y en la que nadie es forastero. Y de ser por ella, así sucedería realmente. Su naturaleza aventurera y a la vez hospitalaria es resultado de la fusión entre el carácter que le dio la ciudad que le vio crecer y la localidad de origen de sus padres: Viveiro, capital de la conocida zona costera de la Mariña Lucense, al norte de Galicia y de la provincia de Lugo, una villa marinera bañada por el Mar Cantábrico y caracterizada por la genuina amabilidad de sus gentes.
Graduada en Turismo, Máster en Dirección y Planificación del Turismo, desarrolló su tesis en torno al potencial turístico del cine y el papel de las film commissions en Galicia y España.
En la provincia de Pontevedra ha trabajado en el Observatorio de Turismo Rías Baixas y en el Monasterio de Acibeiro (Forcarei). En la provincia de A Coruña, ha trabajado en el Castillo de Santa Cruz y como guía turístico en la Torre de Hércules (Patrimonio de la Humanidad).
La curiosidad por la riqueza bio‐cultural de Galicia de esta ‘turistóloga inquieta‘, como ella misma se define, la lleva a explorar el patrimonio natural que la rodea, interesándose en la especial relación que une a ésta con el hombre. Además, profundiza en el respeto y la protección tanto del patrimonio tangible como intangible mediante el estudio y la aplicación de técnicas de interpretación en su presentación al público.
Su estrecha vinculación familiar con la Mariña Lucense y el hecho crecer en una península, marcaron el carácter de esta gallega, que hoy compagina su pasión por el mar con su trabajo en la atención al turista en la Catedral de Santiago de Compostela, fin del Camino de Santiago y crisol de civilizaciones desde hace siglos.
Podéis seguirla en Twitter vía @cgpernas